Edificio de la Sociedad Argentina previo al establecimiento del Museo de Ciencias Naturales.

El Museo Municipal de Ciencias Naturales Carlos Darwin, sito en la ciudad de Punta Alta, nació a partir de la inquietud de la Dra. Teresa Manera, destacada paleontóloga local, y su marido, Roque Bianco, médico de profesión y paleontólogo por afición. La familia Bianco recolectó durante años una gran cantidad de material fósil y arqueológico en tiempos en que era legal hacerlo en nuestro país, con el agregado de que lo hicieron con conocimientos y técnicas científicas. Así fue como ofrecieron esa importante colección a la Municipalidad de Coronel Rosales, con la condición de que se creara un museo de ciencias naturales. Esto se concretó en 1990 con el alquiler de un local en calle J.J. Paso, entre Urquiza y Rosales, lugar donde hoy funciona una conocida ferretería industrial.  Año después se trasladó a calle Humberto Primo, al local donde funcionara la recordada Juguetería Curto para, finalmente, en octubre de 1999, establecerse en su actual ubicación de Urquiza 123, lugar que supo ser en sus orígenes sede de la ex Sociedad Argentina y luego de un boliche bailable (“Star”).

Quizás resulte redundante explicar el motivo del nombre elegido para el museo, pero puede resultar curioso que se haya cambiado el inglés Charles por el muy español Carlos; al respecto debemos decir que, habiendo pasado apenas ocho años de la Guerra de Malvinas antes de la creación del museo, y dado que la misma dejó muchos ciudadanos puntaltenses afectados, se percibió cierta resistencia a que se bautizara con un nombre inglés a una institución local. Finalmente se logró hacer comprender que no importaba la ciudadanía de Darwin, sino su enorme aporte a la ciencia moderna, y que esto estaba íntimamente ligado a nuestra geografía e historia geológica. De todos modos, el municipio aceptó la castellanización del nombre.

El Lic. Ricardo Caputo y la Dra. Teresa Manera.

El Museo Darwin, si bien es modesto en cuanto a sus instalaciones, infraestructura y medios económicos, resguarda un enorme patrimonio especialmente paleontológico, como por ejemplo, moldes y huellas  originales del Yacimiento de Paleoicnitas (huellas fósiles)  de Pehuen Co, únicas en su tipo en el mundo, testigos más que fieles de la abundante fauna (con especies extinguidas y actuales) que habitó lagunas temporarias en nuestra zona, hace unos 12.000 años, y que convivieron con los primeros habitantes humanos de la región. 

Pese a las limitaciones descriptas y en base a un trabajo constante de perfeccionamiento y dedicación del personal, sumado a que no sólo resulta una institución de resguardo y exhibición del material sino que siempre se destacó la necesidad de continuar con las investigaciones que permitan ampliar el conocimiento científico sobre los yacimientos locales y la evolución de las diferentes especies y sus ambientes, el Museo ha logrado ser considerado como un referente a nivel regional, nacional e, inclusive internacional,  para la paleontología de nuestra zona. Un gran impulso para este reconocimiento fue la obtención del Premio Rolex 2004 por parte de la Dra. Teresa Manera, directora científica del Museo.

               Por:  Lic. Ricardo Caputo – Ex. Director Gral. Museo Municipal de Ciencias Naturales Carlos Darwin

                                                                     

                                                                      

EL MUSEO CARLOS DARWIN

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